Muchos hogares cuentan con acuarios de agua dulce como elementos decorativos. Para disfrutar de ellos hay que realizar una serie de tareas de mantenimiento. Por ejemplo, debe contener agua pura y un fondo de arena que debe ser esterilizado en agua hirviendo antes de usarse.
Como alternativa, si no tenemos tiempo y acabamos de comprar los peces, podemos rellenar el acuario con agua mineral. El agua no hay que cambiarla en su totalidad y la temperatura ha de permanecer constante.
Otras recomendaciones son evitar llenarlo excesivamente de agua, aislar los peces enfermos, retirar las plantas muertas, protegerlo del polvo y dotarlo de la iluminación precisa.
Además, los especialistas aconsejan tener un pez “limpia fondos” y otro “limpiacristales” para facilitar el mantenimiento del acuario.
Publicado el 17/05/2015